miércoles, 17 de abril de 2013

Tragedia en el maratón de Boston


Indignación, rabia, tristeza…

Una mezcla de sentimientos se agolpan dentro de mi. No consigo entender cómo pueden ocurrir hechos así. Cada vez que se produce algún atentado pienso en la gente que está allí y que podríamos ser cualquiera de nosotros. El miedo y la inseguridad entran en nuestra actividad diaria.

Hechos como el de ayer hace que recuerde los atentados producidos en 2001 en Nueva York y 2005 en Madrid y como asistíamos atónitos a las noticias e imágenes que nos llegaban. Las víctimas eran gente anónima que estaba en sus puestos de trabajo en New York o yendo a trabajar y a estudiar en el caso de Madrid. Quizás las explosiones de ayer en el maratón de Boston no tengan relación con los otros atentados pero en cualquier caso se trata de un atentado contra la humanidad.

Como amante del deporte, he participado en gran cantidad de carreras en ruta. En otros casos he sido espectadora, en España he asistido a los maratones de Sevilla, Barcelona y casi todos los años nos acercamos a los últimos kilómetros del maratón de Madrid para animar a los corredores. Estos últimos años he podido disfrutar como espectadora de grandes maratones como Berlín ó Nueva York.

animando en Central Park - NY 2011

Los últimos metros de los maratones son emocionantes. El esfuerzo, sacrificio de los corredores están a punto de convertirse en satisfacción, felicidad. Las caras de los corredores transmiten emoción, se ven imágenes maravillosas, familiares y amigos dando ánimos a los corredores, padres que se paran con lágrimas en los ojos para besar a sus mujeres y coger a sus hijos para que atraviesen con ellos el arco de meta. Ilusión y alegría compartida.

La mayoría de los espectadores en la llegada de los maratones son mujeres y niños, gente inocente esperando a sus seres queridos. Personas que tan sólo querían  animar y ser partícipes de la alegría de otros al cruzar la línea de meta.

Una imagen que no puedo quitarme de la cabeza es la que nos muestra a cientos de corredores parados antes de llegar a la meta. Corredores  que ya han corrido más de 30km, que ignoran lo sucedido y a los que en pantalón corto les van llegando las primeras informaciones, sin posibilidad de contactar con sus familiares y sin sus pertenencias. No puedo imaginarme la desesperación de los corredores parados que tuvieran familiares esperándoles en meta.

corredores parados en Boston

No entiendo a la humanidad. No entiendo como hay personas capaces de actuar así. Creo que con lo sucedido en Boston se ha marcado un antes y un después en los maratones, cruzar el arco de meta de cualquier maratón a partir de ahora tendrá mucho más significado.

1 comentario:

Sebas Guim dijo...

Hola Amaya,
Hace muy poco que he descubierto tu blog. Pero he tenido suficiente para decidirme a entregarte un Liebster Award. No sé si conoces estos premios, en el siguiente link te lo explico. Está en catalán, no sé si lo entenderás pero si estás interesada te lo traduzco en un mensaje privado: http://tornaracorrer.blogspot.com.es/2013/04/un-premi-jo-liebster-award.html
Espero que lo disfrutes.
Enhorabuena!!!
Hasta pronto,
Salud!!!
Sebas